El costurero de mi suegra

No pude asistir a la charla de Karina en el XXII Encuentro Genexus, por suerte todos tenemos la posibilidad de acceder a la misma vía el video, no es lo mismo, pero es un buen "Plan B" así que quienes quieran revivirla o verla por primera vez, no dejen de hacerlo, vale la pena. Via web o directamente desde su device bajando la aplicación aquí.



Realmente me encantó la charla de Karina, va a la sustancia de las cosas, a sus colores o sus elementos básicos, en fin, hay que verla.

En la charla cuenta que realizó una encuesta "espontánea" sobre organizaciones exitosas a la cual yo contesté que una de las organizaciones más exitosas que conocía era "el costurero de la Parroquia donde colabora mi Suegra", realmente no sabía que la iba a usar literalmente en su charla charla y le agradezco por eso porque, además de regalarnos una notable charla, me da la oportunidad de compartir la historia atrás del "costurero" ya que dejó la incognita planteada.

¿Cuál es entonces la historia?

El costurero donde colabora mi suegra funciona así: todos los jueves se juntan muchas "viejitas" en la Parroquia del barrio y clasifican la ropa donada que recibieron. Ahí están horas clasificando, reparando (cosiendo), tejiendo algo si recibieron lana, las cosas de crochet que hacen, las colchas de retazos, en fin mil cosas. Además preparando todo para "la venta económica" que es una actividad que realizan el segundo Domingo de cada mes. La "venta económica" se trata de que la gente con menos posibilidades económicas adquiera a precios módicos, normalmente monedas o incluso "a voluntad", la ropa. De este modo la gente no recibe "limosna" sino que dignamente adquiere algo, recaudan algo de dinero para la Parroquia, etc.

Si lo miran como organización, tiene un propósito loable que cumplen con la mayor eficacia. Creo que en realidad ese es el propósito comun y detrás de eso hay diferentes propósitos, para algunas será el ayudar al prójimo, para otras alabar a Dios, para otras simplemente servir o sentirse útiles de algún modo, cada una tendrá el suyo, pero todos se alinean "magicamente" (¿milagrosamente?).

A su vez la pasión con la cual toman el tema me parece también digno de admiración, cada jueves pasa una viejita (mi suegra tiene más de 80 y "las chicas" que la pasan a buscar ninguna baja de eso). Pasan horas en esa actividad. Lo hacen con su mayor empeño, no van "a cumplir" a "que quede así nomás total es mejor que nada", lo hacen como si lo hicieran para su nieto, todo lo hacen así. La vocación de servicio que tienen estar señoras es envidiable.

¿Qué decir sobre la determinación? Como dice Karina, hay cosas que no se pueden definir, se describen pero no se definen. Así que lo describo con una anécdota: "la Coca", una de "las chicas", estaba perdiendo la visión hacía mucho tiempo, tanto que literalmente estaba ciega, a pesar de que ella lo negaba. Como no podía ir sola se turnaban para pasarla a buscar por su casa "casualmente" (nadie quiere ser una carga en ese grupo). Aclaro, la casa de Coca no quedaba "de paso" sino en la otra dirección e iban como lazarillo llevando a su amiga hasta el costurero, era un esfuerzo extra importante.

Cuando le pregunté a mi suegra cómo podía colaborar una persona ciega en un costurero me contestó: "es la que mejor dobla la ropa". Como vio que la respuesta había sido algo tosca profundizó con "además es la que hace los mejores cuentos y ¡no sabes como vende!".

Si el acto de acompañarla "discretamente" y buscarle una actividad específica a Coca para que pudiera colaborar con el propósito no definen un equipo no tengo idea qué lo hace.

Sobre los valores creo que no preciso decir nada más, el propósito en si creo que los define, pero todo el "proceso" refleja la solidaridad, el compromiso, alegría, generosidad, en fin... dificil de describir.

Así es que por eso considero que el Costurero de la Parroquia donde colabora mi Suegra es de las más exitosas organizaciones que conozco porque conjuga: propósito, pasión, determinación, equipo y valores.

Gracias a mi Suegra, sus amigas y a Karina que me dio la oportunidad para compartir esta historia.